Alizé Cornet (37ª del ranking) inició la temporada con una gran posibilidad ante sus ojos. Gracias a la regularidad que ha presentado a lo largo de sus años como profesional desde aquella primera participación en torneos de Grand Slam en Roland Garros 2005, la francesa se ha puesto a la cabeza de la lista de tenistas con mayor cantidad de participaciones ininterrumpidas en cuadros principales de Majors, coronando con un triunfo inolvidable en Flushing Meadows.
La aparición en esta edición del US Open le garantizó el liderazgo del récord con 63 presentaciones consecutivas dejando atrás a la japonesa Ai Sugiyama con 62 y de la italiana Francesa Schiavone con 61.
A comienzos de la temporada accedió por primera vez en su carrera a los cuartos de final en un torneo grande con las importantes victorias que consiguió en el Australian Open sobre Garbiñe Muguruza y Simona Halep. Por entonces, la deportista de 32 años contaba cuáles eran sus principales motivaciones dentro del circuito: "Me digo a mí misma que este será mi último año compitiendo. No estoy segura todavía. Pero creo que así será, quiero jugar al 100% para intentar alcanzar el récord de participaciones seguidas en torneos del Grand Slam. Retirarme después de conseguirlo es una buena idea".
Además de la cifra que alcanzó en este tramo del año, Cornet culminará el año como la tenista que cortó con la racha de 37 partidos ganados de forma consecutiva. En Wimbledon, ante todo pronóstico, la de Niza firmó un triunfo contundente (6-4, 6-2) en tercera ronda y acaparó la atención como la tenista que terminó con el momento de gloria absoluta de la N°1 del mundo.
Y como para agregarle una nueva estrella a su año, en esta edición del US Open se encargó concluir el reinado de Emma Raducanu con una ganancia en sets corridos (6-3, 6-3 en una hora y 41 minutos de juego) en el estreno de la británica en la defensa del título que conquistó en 2021.
La caída en primera ronda le descontará a la nacida en Canadá un total de 2.040 puntos que defendía y caerá del Top 10 al lote de las ochenta tenistas del mundo. En la Era Abierta, las únicas campeonas defensoras del US Open que al año siguiente perdieron en la ronda inaugural fueron Svetlana Kuznetsova (2005) y Angelique Kerber (2017).