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Francisco Cerúndolo alternó buenas y malas durante 2024

Luego de disfrutar la mejor temporada de su temporada, el tenista argentino Francisco Cerúndolo (30°) no logró confirmar su gran nivel para asentarse definitivamente en el Top 20 del ranking mundial durante 2024, totalizando 35 triunfos, 31 derrotas y un título.

El inicio de calendario sería realmente complicado para el mayor de los hermanos, que se despediría en sus respectivos estrenos en Hong Kong, Auckland, Córdoba y Buenos Aires, sufriendo para superar al local Dane Sweeny en cinco parciales en el Abierto de Australia aunque firmando un importante triunfo 7-5 y 6-2 contra el kazajo Dmitry Popko en las Qualifiers de Copa Davis.

Río de Janeiro significaría el trampolín ideal para recuperar la confianza, porque hilvanaría festejos versus su compatriota Francisco Comesaña, el español Albert Ramos Viñolas y el serbio Dusan Lajovic, previo a fallar en semifinales frente a Sebastián Báez, el cual posteriormente despertaría del sueño a Mariano Navone en la definición para levantar el trofeo más relevante de su carrera.

La travesía en tierras estadounidenses no dejaría con el mejor sabor de boca al versátil porteño, el cual cedería en tercera ronda de los Masters 1000, primero ante el anfitrión Ben Shelton en Indian Wells y luego contra el ruso Karen Khachanov, que comenzaría decididamente a marcarle la cancha, en Miami, así como sucumbiría en su debut en el ATP 250 de Houston versus el italiano Luciano Darderi.

Ya en el viejo continente, el moscovita volvería a mostrarle la salida al sudamericano, esta vez en Monte-Carlo y Roma, mientras que alcanzaría la cúspide de su rendimiento en Madrid y Roland Garros al eliminar al alemán Alexander Zverev y al norteamericano Tommy Paul, en dos ocasiones, y acceder hasta cuartos y octavos de final, despidiéndose en manos de Taylor Fritz y Novak Djokovic, respectivamente.

La gira sobre césped culminaría en un abrir y cerrar de ojos para el ex número 19 del ordenamiento, porque no haría pie en Queen's, Eastbourne, título que defendía al convertirse en 2023 en apenas el tercer albiceleste en proclamarse en la superficie, y Wimbledon al perder ante Carlos Alcaraz, Marcos Giron y Roman Safiullin, correlativamente.

El pupilo de Kevin Konfederak encontraría la motivación necesaria en vísperas de los Juegos Olímpicos de París 2024, más precisamente en el polvo de ladrillo del ATP 250 de Umag, ciudad en que despacharía a Matej Dodig, Lorenzo Sonego, Andrey Rublev y Lorenzo Musetti para alzar su tercera copa en el Tour, después de Bastad 2022 y el mencionado Eastbourne.

Unos días más tarde, Cerúndolo iniciaría grandiosamente su segunda experiencia en el evento de naciones, venciendo con categoría al chileno Tomás Barrios Vera por 6-2 y 6-1, dando el golpe sobre la mesa frente al favorito Ugo Humbert al imponerse 7-5, 6-7 (5) y 7-5, y metiéndose entre los ocho mejores en la capital gala, instancia en que caería 6-3 y 6-4 contra un especialista como el noruego Casper Ruud.

Los últimos meses servirían como una perfecta réplica de su irregular 2024, a raíz de que sufriría nuevamente la letalidad de Khachanov, en Cincinnati y Beijing, no haría pie en Shanghai y Basilea, se ilusionaría en Almaty al sacar boleto hasta semifinales y se transformaría en pieza clave en el conjunto nacional en Copa Davis, asegurando tres puntos vitales versus Gran Bretaña, Finlandia e Italia.

De esta manera, Cerúndolo baja la persiana de una temporada con gusto a poco, recordando que se había planteado como objetivo principal inmiscuirse en el Top 10, aunque seguramente el parate le servirá para barajar, dar de nuevo y regresar recargado para competir al máximo nivel durante 2025.